Hoy en vez de utilizar el cercanías como todos los días, me he visto en la obligación de hacer uso del metro a las 15:30, con un calor que te cagas y sin comer, deseando llegar a casa y pegarte una ducha. Con la ilusión de sentarme bajo el aire acondicionado y leer un poco de un libro... JA! cuando me he encontrado con la dura realidad. Hacía tiempo que no vivía esta estupenda experiencia que recomiendo a todo el mundo.
Dicen que en agosto y septiembre en Madrid no hay gente y es por ello que reducen el número de trenes... cabrones, como se notan que los que toman estas decisiones van en coche... mecagueneldiosqueoshacagao!.
El vagón era muy largo y tal, (no como en el de la foto, jajaja) de los fashion que al cerrar las puertas suena a música de psicosis, de los que tienen televisión e incluso existe con modalidad de apartamento individual para transporte de maleta... pues el muy puto estaba imposible de oxígeno y hasta el culísimo de peña: peña obrera chorreante de sudores y suspiros que funguelaban a jornada laboral realizada que no hacía más que empujar y empujar...
El primer encontronazo ha sido muy duro. Unas cuantas jovenzuelas con sus bolsos de regalo con la revista Ragazza u similar se quejaban de los empujones entre risas y sudores, el pote se iba corriendo y los escotes aflorando. Poco a poco eso se iba caldeando y se iba sumando gente a la fiesta, nunca he visto a tanta peña junta y tan fea. Un hombre chorreaba goterones de sudor por su lisa cabecita sin asomo de pelo alguno, un joven vestido con traje no paraba de suspirar y gemir mirando al techo (un traje horrible que le quedaba grande por todos los lados, la corbata a medio deshacer, el pobre chaval debía haber encogido con los calores), una adolescente aprovechaba la coyuntura para sacar un cedese y termirar de maquillarse (hay gente pa tó), otra con aspecto de bruja del norte de mago de oz se me arrimaba lascivamente mientras intenta restregarse con gran depravación... cada vez se me pegaban más y más cuerpos sudorosos de la transpiración para contactar con mis carnes ansiosas de liarse a leches y gritar de tanto agobio.
Dicen que en agosto y septiembre en Madrid no hay gente y es por ello que reducen el número de trenes... cabrones, como se notan que los que toman estas decisiones van en coche... mecagueneldiosqueoshacagao!.
El vagón era muy largo y tal, (no como en el de la foto, jajaja) de los fashion que al cerrar las puertas suena a música de psicosis, de los que tienen televisión e incluso existe con modalidad de apartamento individual para transporte de maleta... pues el muy puto estaba imposible de oxígeno y hasta el culísimo de peña: peña obrera chorreante de sudores y suspiros que funguelaban a jornada laboral realizada que no hacía más que empujar y empujar...
El primer encontronazo ha sido muy duro. Unas cuantas jovenzuelas con sus bolsos de regalo con la revista Ragazza u similar se quejaban de los empujones entre risas y sudores, el pote se iba corriendo y los escotes aflorando. Poco a poco eso se iba caldeando y se iba sumando gente a la fiesta, nunca he visto a tanta peña junta y tan fea. Un hombre chorreaba goterones de sudor por su lisa cabecita sin asomo de pelo alguno, un joven vestido con traje no paraba de suspirar y gemir mirando al techo (un traje horrible que le quedaba grande por todos los lados, la corbata a medio deshacer, el pobre chaval debía haber encogido con los calores), una adolescente aprovechaba la coyuntura para sacar un cedese y termirar de maquillarse (hay gente pa tó), otra con aspecto de bruja del norte de mago de oz se me arrimaba lascivamente mientras intenta restregarse con gran depravación... cada vez se me pegaban más y más cuerpos sudorosos de la transpiración para contactar con mis carnes ansiosas de liarse a leches y gritar de tanto agobio.
Sólo he vivido una experiencia similar en mis años mozos. Era un concierto en una cutre sala de jevilongos cuya ventilación dejaba mucho que desear... en el descanso, glorioso momento para pillar algún refrigerio, el pasar entre la multitud hacía que te llevases todas las sudoraciones de esos machos adolescentes que sin camiseta pululaban de aquí para allá con sus minis y sus chuflos coreando el "decidí... aprender a hacerme yo la maleta..." pero en ese contexto todo era agradable... ains, era un "momento sauna" la mar de acogedor en el que todo valía.
Total, el viaje se me ha hecho eterno, además que soy propensa a marearme en situaciones de agobio a la espera de que algún joven apuesto me coja en sus brazos... y acto segudo me saque violentamente la cabeza por la ventanilla... jajaaj, que recuerdos.
Total, el viaje se me ha hecho eterno, además que soy propensa a marearme en situaciones de agobio a la espera de que algún joven apuesto me coja en sus brazos... y acto segudo me saque violentamente la cabeza por la ventanilla... jajaaj, que recuerdos.
Cuando he podido salir de esa mierda de vagón he vuelto a creer en dios al sentir ese aire, me gustaría decir fresco pero más bien era una bofetada de calor de 35 grados, pero con oxígeno oye, que es lo que cuenta.
¡y que viva la renfe!
¡y que viva la renfe!
(lo más leido de coda, lo mas comentado, lo mejor del blog)
10 comentarios:
Anónimo dijo...
Coda, Codita, te desmayas y no ocurre nada ya que sigues de pie entre la multitud que te aplasta es lo que tiene usar el tan práctico transporte público. Además el príncipe azul no podría avanzar entre la muchedumbre o le habrían puesto oxígeno ante una axila a la que el desodorante ha abandonado.
Por cierto los de renfe podrían dejar de subir el puñetero bono
Sinceramente tuyo; el muy misterioso, siempre atento anonymous number two
Apañao dijo...
Si el genial Gallardón no hubiera decicido poner todo Madrid patas arriba, con el consiguiente riesgo de perder la vida jugando a los rallies en la M-30, seguro que tu churry estaría dispuesto a ir a buscarte al curro en su superbuga, como hace años.
Aunque no nos han concedido las olimpiadas, hay quién no se ha enterado, y ya tenemos todas las instalaciones posibles para practicar deportes de riesgo, cada vez que te quieres mover por Madrid.
Mila-Z dijo...
Pues se ve que ni dios va a currar a las 14:20 en verano en Cartagena, cuando subo al bus hay cuatro gatos que se bajan en la parada siguiente, a partir de esa parada, se sube un/a pringao/á en las sucesivas 5 paradas.
Es genial, puedo elegir sitio, aunque hoy una petarda me ha robado MI sitio, de esas dos filas de asientos que se miran, yo me cojo de la fila que mira palante el asiento que está pegao al cristal, es el único sitio donde me caben las patukis, en los otros me hago daño en las rodillas.
Cuando curraba por las mañanas era más exagerao, a las 06:30 los fines de semana no habían más que el conductor, un julai con pinta camarero y una tipa con una cara de mala ostia impresionante (yo).
Mila-Z dijo...
Amos, pero no siempre, a veces de las 5 paradas solo se suben 3, uno por parada.
Anónimo dijo...
Cómo puedes decir eso?
El metro es lo mejor del mundo mundial, y sobre todo sus empleados. Esos taquilleros tan guapos, ummmm. Conozco uno que ya está por cierto en la línea 4, que se muere por pillarte por banda pa multarte por injurias. Ahora está de vacaciones, pero cuando vuelva te va a perseguir por el andén a golpe de megafonía:
"Atención seguridad, atención, saquenmé a la mujer de las sandalias naranjas, que por el olor deduzco que es una bomba química".
Por cierto, que ese taquillero dice que en su mes de vacaciones no va a pillar el metro ni pá atrás, o sea que no entiendo esa contradicción. Con decirte que se va a Canarias pq dice que allí no hay metro. Aún así se arriesgará a cogerlo para ver tu nidito de amor.
Un beso, zafia mía.
Coda dijo...
Pues hoy sí que casi me desmayo rodeada de señores echándome el fétido aliento encima mientras gotean como cerdos, puag!! menos mal que a esas distancias el cotilleo es más certero y es imposible aburrirse, jajaja.
Me estoy acordando de una mañana esperando el metro, estaba imposible pillar asiento a esas horas, y eso que venía prácticamente vacío. Había cientos de personas en el andén. Bueno, cuando entró en la estación el metro, antes de que parara, un pive con mochila se tiró a la zona que une dos vagones, la peña se creía que se iba a suicidar o algo y le intentaron sujetar por la mochila, el tío pasó, y se coló en el vagón por la puertecilla aún en marcha... lo que hacen algunos.
De las marujas gorronas no hablo que no me quedan gigas..
Sally cabrona, que envidia de la mala me das... pues yo me voy a cartagena!! a montar en bus!!
Anónimo dijo...
No se como te quejas codita, con lo emocionante que es la posibilidad de que entre la multitud te metan mano.
♥KiTtY KaT♥ dijo...
holaa coda aki haciendo mi largo viaje desde mexico para saludarte jejejejeje cuidese y pasate un super buen fin!!!!!!
Anónimo dijo...
Lo de un "super buen fin" ha sonado a "zorra, pasatelo RE bien mientras mueres...muahahaha" o es cosa mía??!!!
Anónimo dijo...
Lo que mola es viajar en la FEVE, que parecen cochecitos del parque de atracciones, con las mismas posibilidades de piñartelas, buahhahahahahahajajaj!!